Este miércoles, el Gobierno de Javier Milei comunicó que se prohibirán los traslados de prisioneros por motivos relacionados con el cambio de género, así como también se impedirá que los menores de 18 años se sometan a tratamientos hormonales para alterar sus cuerpos según su "identidad de género autopercibida".
Las nuevas medidas fueron presentadas en una conferencia de prensa por el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien explicó que estas disposiciones buscan avanzar hacia un sistema "mucho más razonable" y asegurar los derechos de los niños.
En este contexto, en una entrevista con la periodista kirchnerista Maria O' Donnell, en el programa "De Acá en Más", Javier Belinky, un especialista en "cirugía reconstructiva genital y de género", criticó fuertemente la decisión del presidente argentino y exigió que se puedan seguir mutilando a niños.
"Vamos a volver a ver lo que veíamos hace 20 años: gente con auto lesiones por malestar, gente con depresión, gente que va a recurrir a cirugías clandestinas y hormonoterapias clandestinas", afirmó el "especialista".
Javier Milei, presidente de Argentina. | La Derecha Diario
El Gobierno de Milei había explicado que La Ley de Identidad de Género permite que las personas puedan someterse a tratamientos de hormonización y a intervenciones quirúrgicas a fin de adecuar su cuerpo al género con el que efectivamente se identifiquen.
Sin embargo, la norma votada por la amplia mayoría del espectro político en el año 2012 no solo permite esto a los mayores de edad, sino también a los menores de 18 años.
"De esta forma, hoy los menores que lo deseen pueden hacer tratamientos y cirugías para cambiar su cuerpo en función de cómo se autoperciben. Más aún, si bien necesitan del consentimiento de sus padres para estos procedimientos médicos, si alguno de ellos decide no otorgarlo, se puede incluso apelar a un juez para que lo autorice".
En relación con este aspecto, Adorni había explicado que la legislación anterior ponía a los menores en un peligro grave para su salud, tanto física como psicológica, ya que dichos tratamientos interferían con su proceso de desarrollo y, en muchos casos, los efectos son irreversibles.
En la entrevista con la periodista kirchnerista, Javier Belinky intentó justificar la mutilación de niños: "Las personas que estamos conformes con nuestro género y genitalidad no pedimos ese tipo de cirugías, las personas que piden, desean o necesitan este tipo de cirugías van por todo porque el disconfort de tener una genitalidad y un género biológico diferente al que perciben es súper fuerte, la decisión[de operarse]no es fuerte".
Y reveló: "Mi primera cirugía es en 2005, no lo hacíamos de forma ilegal, las personas que querían este tipo de cirugías le hacían un juicio al Estado y me autorizaban a operar. Tengo 1.300 cirugías de identidad de género, tengo solo 16 casos de menores de 18 años".
Javier Milei, presidente de Argentina. | La Derecha Diario
El mutilador de niños continuó: "Me llama la atención lo prohibitivo de manera exagerada. Esto que es tan dogmático me preocupa un poco. Prohíben todo gesto médico en personas con identidad transgénero o no binarios menores de 18 años".
Por su parte, el Gobierno de Milei también habia afirmado que los "países pioneros del cambio de género como el Reino Unido, Suecia, Finlandia y recientemente EE. UU. están dando marcha atrás prohibiendo que los menores puedan someterse a estos procesos por considerarlos irreversibles y con devastadoras consecuencias a largo plazo".
"Esta medida, lejos de afectar a un sector en particular, tiene como fin garantizar el interés superior del niño y proteger la integridad física y mental de los menores, es responsabilidad del estado nacional garantizar los derechos del niño, y este es un paso en esta dirección", aseguraron desde la administración libertaria.
Sin embargo, al no poder mutilar a niños, Javier Belinky se lamentó por la prohibición, afirmando: "Me preocupa mucho qué van a hacer con las personas adolescentes que empezaron su tratamiento y van a tener que suspenderlo".
Fuente: Derecha Diario