El Gobierno de Javier Milei continúa con su plan de privatización de empresas estatales, y tras la reconversión del Banco Nación, avanza ahora con Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT).
La transformación del complejo minero en sociedad anónima es el primer paso en el proceso de saneamiento y eventual venta a inversores privados.
Transformación en sociedad anónima y reducción del déficit
La decisión se formalizó a través del Decreto 115/2025, publicado en el Boletín Oficial y firmado por el Presidente. La medida fue impulsada por Diego Chaher, titular de la Agencia de Transformación de Empresas Públicas, y establece que el 95% de la participación accionaria quedará bajo la Secretaría de Energía y el 5% en la Secretaría de Minería, ambas dependientes del Ministerio de Economía.
La conversión de YCRT en sociedad anónima busca dotarla de mayor eficiencia operativa y reducir los aportes estatales necesarios para su funcionamiento, en línea con la estrategia de Milei de disminuir el déficit fiscal. En este sentido, la nueva sociedad deberá presentar en 60 días (con una prórroga de 30 días adicionales) un presupuesto que reduzca al mínimo los aportes del Tesoro Nacional, así como un plan de inversiones que garantice su operatividad.
YCRT es un agujero negro fiscal | La Derecha Diario
Un proceso de privatización complejo
YCRT es una de las nueve empresas estatales incluidas en la Ley Bases como sujetas a privatización o concesión. Sin embargo, el camino hacia su venta no será inmediato: el Gobierno debe primero saneár su estructura financiera y operativa. En este contexto, se trabajará en la regularización de balances, actualización de reglamentos internos y optimización de recursos.
La estatal enfrenta una profunda crisis que combina problemas estructurales, económicos y políticos. Entre los principales desafíos se encuentran:
- Sobredimensionamiento de la plantilla laboral, con una estructura de costos que no se justifica por el nivel de producción.
- Falta de inversión en tecnología y maquinaria, lo que limita su capacidad de extracción y comercialización.
- Manejo irregular de fondos y problemas administrativos, con antecedentes de corrupción en distintas gestiones.
La planta de producción de carbón está lejos de ser rentable | La Derecha Diario
El rol de Santa Cruz en la reestructuración
El gobernador de Santa Cruz, Claudio Vidal, fue notificado de la medida por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos. La relación entre el Gobierno nacional y el mandatario provincial ha sido oscilante, por lo que la administración de Milei evitó avanzar sin su conocimiento.
En Santa Cruz existe la sospecha de que la Nación buscará que la provincia asuma la responsabilidad de la mina y de los trabajadores, mientras que la central eléctrica -considerada la parte más rentable del complejo- pasaría a manos privadas.
Esta posibilidad ha generado tensiones políticas, especialmente tras la designación de Pablo Sebastián Gordillo Arraigada, hombre de confianza de Vidal, al frente de YCRT.
El Gobierno buscará que YCRT quede en manos privadas | La Derecha Diario
Producción de carbón y limitaciones logísticas
A pesar de los problemas operativos, el carbón de Río Turbio tiene demanda en el mercado internacional, particularmente en China, que requiere grandes volúmenes para su industria. No obstante, la producción actual de la mina no alcanza los niveles necesarios para abastecer este mercado:
- China exige una producción mínima de 30.000 toneladas mensuales, mientras que YCRT solo podría alcanzar 20.000 toneladas en el mejor de los casos.
- La ubicación geográfica es una barrera: el carbón debe recorrer 300 km hasta el puerto, lo que eleva los costos logísticos y reduce su competitividad.
Previo a la publicación del decreto, expertos locales consideraron que un plan de inversión estatal a largo plazo podría mejorar la eficiencia y viabilidad de la mina. Sin embargo, el Gobierno descartó esta alternativa, ya que contradice el objetivo de Milei de reducir el gasto público y el déficit fiscal.
Futuro incierto y desafíos de la privatización
El Gobierno aún no definió cuándo se concretará la venta de YCRT, aunque se sabe que tres grupos empresarios han manifestado interés en la compra. Mientras tanto, la prioridad será avanzar en la optimización de costos, reducción de personal innecesario y adecuación contable para hacerla atractiva a posibles inversores.
El proceso no está exento de desafíos: además de las dificultades estructurales de la empresa, existen resistencias políticas y gremiales que podrían obstaculizar el avance de la privatización. Sin embargo, para la administración de Milei, este es un paso clave en su plan de achicamiento del Estado y reducción del déficit fiscal.
Fuente: Derecha Diario