La alineación del gobierno de Javier Milei con Donald Trump es total. En esa línea, y siguiendo paso a paso los anuncios del presidente republicano, trascendió en las últimas horas la intención del titular del Ejecutivo Nacional de retirarse de la Organización Mundial de la Salud y el Acuerdo de París entre otros foros y organismos internacionales que no coinciden con sus posiciones.
Bien conocidos son los cuestionamientos libertarios hacia la evidencia científica en torno al cambio climático. De hecho, en el mes de novimbre, la Cancillería argetina retiró a la delegación nacional de la Cumbre del Clima (COP29) que se realizó en la capital de Azerbaiyán. Y cabe recordar que el Acuerdo de París se firmó en el año 2015 con el objeto de mitigar el calentamiento global. «Me retiro inmediatamente de la injusta y unilateral estafa climática de París. Estados Unidos no saboteará nuestras propias industrias mientras China contamina impunemente», manifestó Trump apenas asumió en su cargo.
En cuanto a la Organización Mundial de la Salud, ya son más que conocidos los cuestionamientos del Presidente y sus aliados, como es el caso, por ejemplo, de la gestión de la pandemia y las cuarentenas. Semanas atrá, el vocero Manuel Adorni expresó: «Argentina no va a adherir al acuerdo de pandemia de la OMS, que se comunicó en Ginebra, donde dejamos en claro que nuestro país no suscribirá a ningún acuerdo pandémico que pueda afectar la soberanía nacional», afirmó en relación al nuevo protocolo sobre pandemias. También son conocidas las críticas y cuestionamientos del Gobierno a la llamada Agenda 2030
“La idea es aprovechar el impulso del triunfo de Trump para recuperar soberanía”, argumentaron fuentes gubernamentales en diálogo con la agencia Noticias Argentinas. Y remarcaron el total acuerdo con las posiciones de Trump en relación a estos organismos.
Según señalan, la decisión de estudiar la permanencia de la Argentina responde a las falencias que encuentran en las corporaciones que “no cumplen la función para las que fueron creadas”. Si bien la idea no es nueva, el cambio de gobierno en el norte del continente y los recientes anuncios del jefe de Estado le otorgan a la gestión libertaria el respaldo que necesita para tomar la decisión, aunque por estas horas evalúan también las implicancias jurídicas de la salida.
Trump no es el único que considera que la OMS realizó una “mala gestión” durante la pandemia de COVID-19. Desde el entorno de Milei revelaron que el mandatario tiene intenciones de “investigar las barbaridades que se hicieron durante la cuarentena”.
La decisión aún no está tomada, pero la lista de entidades que acumulan críticas y generan desconfianza alcanza también a la Organización Mundial del Comercio (OMC) y al Mercosur, de obstaculizar la posibilidad de cerrar un tratado de libre comercio con Estados Unidos.
En Balcarce 50 mantienen duras críticas a la Organización de las Naciones Unidas, pero tienen pleno conocimiento del peso que mantiene a nivel mundial, por lo que prefieren insistir en marcar las diferencias, y en todo caso, abandonar alguno de los organismos multilaterales que la integran.
En las últimas horas, el mandatario hizo eco de lo que su mesa chica trabaja al confirmar la posibilidad de romper con el bloque regional de ser una “condición extrema” para ampliar las relaciones entre ambas naciones.
“Creemos que se puede lograr sin tener que abandonar lo que se tiene en materia de Mercosur”, sostuvo desde Suiza, en una entrevista a la agencia Bloomberg, y concluyó: «Estamos explorando la manera de que Argentina se pueda abrir al comercio internacional porque la división del trabajo trae prosperidad».
Fuente: Conclusión