La comisión de Acuerdos del Senado de la Nación firmó este miércoles el dictamen para el tratamiento del juez federal Ariel Lijo en el recinto de la Cámara alta como ministro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. La postulación reunió las 9 voluntades para el dictamen de mayoría que el Gobierno quiere tratar el 20 de este mes en sesión extraordinaria.
En cambio, el pleigo del otro candidato del Gobierno para ocupar un lugar en el máximo tribunal de justicia del país, el abogado conservador Manuel García Mansilla, no parece seguir la misma suerte que el juez Lijo. En la Casa Rosada crece la idea de que sea designado en la Corte por medio de un decreto del presidente Javier Milei, para nombrarlo en comisión.
El despacho que impulsa la candidatura de Lijo lleva la firma los peronistas Sergio Uñac (San Juan), Lucía Corpacci (Catamarca) y el Claudia Abdala de Zamora (Santiago del Estero); por el lado de los federales, lo rubricaron Carlos Arce (Misiones), Juan Carlos Romero (Salta) y Carlos Espínola (Corrientes).
Mientras que por la Unión Cívica Radical (UCR) lo hizo el jefe de bloque, Eduardo Vischi (Corrientes); por el PRO, la rúbrica la estampó Beatriz Ávila (Tucumán) y en el oficialismo hizo Ezequiel Atauche (Jujuy).
La acción se concreta en medio de una ola de rumores desperdigados desde la Casa Rosada y que dan cuenta de un eventual tratamiento en los próximos días. La fecha sería el 20 de este mes.
Podría tratarse la próxima semana cuando el cuerpo vaya al recinto, por primera vez en el año, para discutir la reforma electoral y las leyes de reiterancia, reincidencia y juicio en ausencia -aún pendientes de dictamen-, tres iniciativas que lograron la luz verde de la Cámara de Diputados.
El pliego de Lijo fue el más objetado en su paso por la audiencia pública que se realizó el pasado 17 de agosto, en el Salón Azul del Congreso. Recibió decenas de cuestionamientos por parte de instituciones satélites del Poder Judicial.
Aún resta saber cuál será el futuro del otro candidato a integrar la Corte Suprema: el abogado constitucionalista Manuel García Mansilla. Ni siquiera tiene las 9 firmas para llegar al hemiciclo senatorial.
Fuente: Conclusión